10 mayo 2006

El peligro del avance del fanatismo y la superstición

Estoy preocupado. Estuve leyendo un par de articulos en Clarin que se refieren a las reacciones siniestras del Opus Dei y otros a sueldo de la iglesia católica sobre la película de Brown "El Código Da Vinci", la cual sin ser gran cosa al menos da una cierta mirada sobre las monstruosidades de la iglesia. Un rato antes me enteré que en Iran por órdenes del ayatollah de turno dieron marcha atrás con una norma (sorprendente para ellos) que hubiera permitido a las mujeres ir a un estadio de fútbol a ver un partido. Grave ofensa para Ala, supongo.

¡Como extrañan la Inquisición estos modernos discípulos de Torquemada! Me pregunto, ¿no se podrá formar una Asociación Internacional de defensa del libre Pensamiento, destinada a enfrentar a los fanáticos religiosos sueltos que cada vez alcanzan mas poder? En EEUU la derecha religiosa intenta destronar a la Ciencia y niega a Darwin, pretendiendo una vez mas que la realidad se adapte a la estúpida creencia. Ponen bombas a las clínicas que practican abortos, intentan enseñar "religión" ( o sea la biblia y otra sarta de imbecilidades a granel) y pretenden prohibirle a los homosexuales que se casen. En España por ese tema también la catoliqueria anduvo activa, metiéndose como siempre en la vida y en las elecciones personales de los demás.

No es hora de tibiezas. Los fanáticos estan cada vez mas activos, y su poder crece amparado en la ignorancia. Cada escuela que cierra o no funciona significa una iglesia mas para incrementar el oscurantismo y el fanatismo sobre la faz de la Tierra. Cada lider religioso pontificando absurdos y transformando a sus fieles en armas significa un paso mas hacia las hogueras y la caza de brujas. Los papas y pastores, ayatolahs e imanes son todos ramas del mismo arbol repugnante.

Es cierto que no todas las religiones son tan intrínsecamente dañinas como las judeocristianas y árabes. Pero también hindues , sintoistas y algunas sectas entre otros han perpetrado en su momento horrores similares, aunque nunca en la escala de las religiones proféticas surgidas de las mentes calcinadas por el sol de la judea y la arabia fanáticas.

¿Es que acaso no hay en el mundo nadie que vea subir la oscura marea? ¿Somos acaso los libertarios tan dóciles que estamos dispuestos a ser nosotros los que pongamos la otra mejilla? Mas cristianos seríamos los agnósticos entonces que los propios bibliófilos cristianos siempre dispuestos a asesinar y torturar a los que no compartan sus creencias y supersticiones.

En la Antigüedad, los griegos se gloriaban de luchar e incluso morir en defensa de su libertad. Quizás este llegando nuevamente el momento de imitarlos.

Yo no pienso ir mansamente a la hoguera, por cierto.